Tortitas de calabaza: Un delicioso desayuno otoñal Mmh, ¡calabazas y tortitas! Dos cosas que, a primera vista, podrían parecer tan incompatibles como llevar botas de agua con un vestido de baile. Pero, queridos lectores, en el caprichoso mundo del Flying Tiger Copenhagencreemos en lo inesperado. Así que, ¿por qué no casar el encanto otoñal de las calabazas con la realeza del desayuno que son las tortitas? Si te estás rascando la cabeza y pensando: "¿Es esta una combinación culinaria hecha en el cielo o sólo un experimento estrafalario?", estás a punto de descubrirlo. Ingredientes 1 ½ tazas de harina de repostería (porque nuestras tortitas se merecen ese rebote extra) ¾ taza de puré de calabaza fresca (el alma de esta receta) 3 cucharadas de azúcar en polvo (para ese sutil susurro dulce) ¼ cucharadita de sal (para equilibrar el dulzor) ½ cucharadita de cardamomo o canela (o ambos si se siente aventurero) 2 huevos grandes (los aglutinantes de nuestra obra maestra culinaria) 1 ¼ tazas de leche (para que la masa tenga una consistencia suave) 2 cucharadas de mantequilla derretida (y un poco más para freír) Método Preparación: Para empezar, asegúrate de que el puré de calabaza esté homogéneo. Si lo prepara desde cero, simplemente tueste o cocine al vapor los trozos de calabaza hasta que estén tiernos y, a continuación, mézclelos hasta obtener una mezcla homogénea. Recuerda que lo mejor es fresco: es como comparar un concierto en directo con un jingle de radio. Empecemos a mezclar. En un bol grande, tamizar la harina. Esto no sólo garantiza que no queden grumos, sino que también airea la harina, dando a nuestras tortitas esa esponjosidad de ensueño. Añadir el azúcar en polvo, la sal y las especias elegidas. Bátalo un poco; piensa que es como añadir un poco de magia. En otro bol, bate los huevos, la leche y la mantequilla derretida. Vierta esta mezcla húmeda en los ingredientes secos. Ahora, mézclalo todo suavemente. La clave está en mezclar hasta que todo esté bien combinado. No pasa nada si quedan algunos grumos: son como las encantadoras imperfecciones que nos hacen únicos. Cocinar: Calentar una sartén antiadherente a fuego medio y añadir un poco de mantequilla. Cuando esté derretida y la sartén caliente, vierta un poco de masa para formar una tortita. Cocina hasta que veas que se forman burbujitas en la superficie y dale la vuelta. El objetivo es conseguir ese encantador tono dorado en ambos lados. Repite la operación hasta terminar la masa. Sugerencias para servir: Coloque las tortitas en un plato. Rocíelas con sirope dorado o, para darle un toque extra, con una generosa porción de nata. Y si está pensando: "¿Podría añadir una pizca de azúcar glas o un puñado de bayas frescas?", nuestra respuesta es un rotundo: "¡Por supuesto!". Así que, ¡ahí lo tenemos! Una deliciosa fusión de peculiaridades culinarias británicas y danesas, todo ello envuelto en una tortita. Sabemos lo que puede estar pensando: "¿Es la próxima gran novedad en desayunos o sólo una moda caprichosa?" ¿Por qué no visita Flying Tiger Copenhagen y decide por ti mismo. Y de paso, comparte con nosotros tus historias sobre las tortitas de calabaza. Porque, después de todo, ¿no es la vida un poco más divertida con una pizca de lo inesperado? Suscríbete a nuestra newsletter ¿Te apetece probar otras delicias clásicas? Únete a nuestro boletín y descubre el lado más sabroso de la vida. Inscríbete aquí